El presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó este lunes 1 de diciembre una advertencia directa al gobierno de Honduras, al asegurar que habría “consecuencias” si se modifican los resultados preliminares de las elecciones presidenciales celebradas el 30 de noviembre. La declaración, difundida en su cuenta oficial de Truth Social, se suma a un clima de tensión política en el país centroamericano después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) detuviera el conteo de votos la noche de los comicios.
La reacción de Trump llega mientras continúa la incertidumbre electoral en Honduras, un país con estrechos vínculos con la comunidad hispana en Estados Unidos por su alto flujo migratorio, sus relaciones bilaterales en materia de seguridad y la presencia de una amplia diáspora hondureña en ciudades como Houston, Nueva Orleans, Nueva York y Miami. Lo que ocurra en Tegucigalpa puede tener efectos directos en temas como la migración, la cooperación bilateral y programas de asistencia social.
La advertencia de Trump y el estado del conteo
Trump afirmó que “Honduras está tratando de cambiar los resultados” y sostuvo que, de confirmarse, “habrá consecuencias”.
El mandatario no precisó a qué tipo de acciones se refería, pero su mensaje aumenta la presión internacional sobre el CNE, que detuvo el conteo cuando apenas se había contabilizado el 47 % de las actas electorales.
El presidente estadounidense también destacó que el recuento se interrumpió justo cuando la contienda mostraba una diferencia mínima entre los candidatos Nasry Asfura y Salvador Nasralla, con una ventaja inicial de alrededor de 500 votos para Asfura.
En publicaciones posteriores, Trump insistió en que “cientos de miles de hondureños deben tener sus votos contados” y calificó como “imperativo” que el proceso electoral sea completado sin retrasos.
Cifras preliminares en un proceso lento y tenso
Horas después del mensaje de Trump, el CNE divulgó un nuevo informe preliminar basado en el 57,03 % de las actas escrutadas.
La actualización confirma un empate técnico entre los candidatos:
Nasry Asfura (Partido Nacional): 39.91 %
Salvador Nasralla (Partido Liberal): 39.89 %
La diferencia, de apenas 515 votos, alimenta el clima de incertidumbre en un país que ha enfrentado múltiples crisis postelectorales durante la última década.
Asfura, exalcalde de Tegucigalpa, ha contado con respaldo público de Trump durante la campaña, mientras que Nasralla, figura política y presentador televisivo, ha liderado movimientos de oposición desde hace años.
Una fuente cercana al Ejecutivo hondureño, citada por EFE bajo condición de anonimato, afirmó que “el resultado de las votaciones es un castigo de los ciudadanos que se sienten defraudados por promesas incumplidas de Libre”, el partido actualmente en el poder.
La misma fuente señaló que la candidata oficialista, Rixi Moncada, “tuvo poca aceptación en las bases desde el principio”, lo que explica el bajo desempeño del partido gobernante.
Por qué esta elección importa a hispanos en EE.UU.
Para la comunidad hondureña en Estados Unidos —más de un millón de personas, muchas de ellas en proceso migratorio o con familiares en Honduras— la transparencia en el proceso electoral es fundamental.
Un cambio abrupto en la legitimidad del gobierno podría impactar: Solicitudes de TPS y asilo, Programas de cooperación bilateral, Flujos migratorios y seguridad fronteriza, Relaciones económicas y remesas, que representan una parte crucial del PIB hondureño.
Además, la postura de Washington es clave para la estabilidad política en Centroamérica.
La advertencia de Trump marca un mensaje fuerte sobre la vigilancia estadounidense en procesos electorales de la región, especialmente en países con alta migración hacia EE.UU.
El CNE no ha anunciado cuándo reanudará el conteo total, pero observadores locales e internacionales coinciden en que el organismo enfrenta una de las pruebas más difíciles de los últimos años.
Todo apunta a que el resultado final dependerá de un escrutinio minucioso, con atención mundial puesta sobre cada avance.
