Este domingo 10 de agosto de 2025, la vida de Kevin Mares, un joven hispano de 25 años residente en Nueva York, se apagó trágicamente durante sus vacaciones en Puerto Rico. Viajó a la isla para disfrutar con amigos y asistir a un concierto de Bad Bunny, pero terminó atrapado en medio de un tiroteo en la comunidad de La Perla, en San Juan.
Según las autoridades, el incidente ocurrió cerca de las 4 a. m. en un club nocturno, tras una discusión que rápidamente escaló a violencia armada. Kevin Mares recibió impactos de bala en el abdomen y en el costado, y aunque se le trasladó de urgencia al Centro Médico de Río Piedras, no logró sobrevivir a las heridas.
Heridos y búsqueda del responsable

En el mismo ataque donde perdió la vida Kevin Mares, resultaron lesionados dos residentes locales, un hombre y una mujer, ambos en la cuarentena.
Se les atendió en un hospital cercano y, hasta el momento, se desconoce su estado de salud.
La policía halló un cargador de arma de fuego en un callejón próximo, pero no encontró casquillos.
Esto podría indicar el uso de un arma modificada o con dispositivos que evitan el rastro balístico.
Las autoridades mantienen abierta la investigación y han solicitado la colaboración ciudadana para dar con el paradero del responsable.
Una familia rota y una campaña de ayuda

La muerte de Kevin Mares ha dejado a su familia devastada.
Era un hijo querido, un amigo leal y un joven con grandes planes para el futuro, incluyendo proponer matrimonio a su novia de seis años este otoño.
Estudiaba para convertirse en veterinario y trabajaba en dos empleos para alcanzar sus metas.
Ante la tragedia, sus seres queridos iniciaron una campaña en GoFundMe con el objetivo de recaudar fondos para trasladar su cuerpo desde Puerto Rico a Nueva York y cubrir los gastos del funeral.
La respuesta de la comunidad ha sido abrumadora, con miles de personas aportando en señal de apoyo y solidaridad.
La Perla: belleza y riesgo

La Perla es un barrio costero escenario de proyectos de rehabilitación, pero también conserva una reputación marcada por la criminalidad.
Aunque es visitado por turistas y ha aparecido en producciones musicales internacionales, episodios de violencia como el ocurrido reavivan las advertencias sobre la necesidad de extremar precauciones en determinadas zonas de la isla.
La historia de Kevin Mares es un recordatorio doloroso de que incluso un viaje de celebración puede verse truncado por la violencia.
Subraya también la importancia de la prevención y la solidaridad comunitaria en momentos de crisis.
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