Este 30 de mayo de 2025, la Corte Suprema de Estados Unidos autorizó al gobierno del presidente Donald Trump a revocar el programa de parole humanitario que beneficiaba a más de 530,000 migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
Esta decisión anula temporalmente una orden previa de una jueza federal en Massachusetts que bloqueaba la terminación masiva del programa.
Contexto del programa

Implementado en 2022 durante la administración de Joe Biden, el programa de parole humanitario permitía la entrada legal y temporal de migrantes de los cuatro países mencionados.
Siempre que contaran con un patrocinador en EE.UU. y aprobaran verificaciones de antecedentes.
El objetivo era ofrecer una vía segura y ordenada para quienes huían de crisis humanitarias.
Detalles del fallo

Con una votación de 7 a 2, la Corte Suprema suspendió la orden de la jueza Indira Talwani, quien había dictaminado que la revocación del parole debía evaluarse caso por caso.
Las juezas Ketanji Brown Jackson y Sonia Sotomayor disintieron, argumentando que la decisión podría causar “consecuencias devastadoras” para cientos de miles de personas.
Esta decisión anula temporalmente una orden previa de una jueza federal
El gobierno de Trump sostiene que la eliminación del programa es esencial para reforzar la seguridad fronteriza y disuadir la inmigración ilegal.
Sin embargo, organizaciones de derechos humanos y defensores de migrantes advierten que esta medida expone a los afectados a deportaciones rápidas y posibles peligros en sus países de origen.
Implicaciones para los migrantes

Con la revocación del parole, los beneficiarios pierden su estatus legal y autorización de trabajo, enfrentando la posibilidad de deportación inmediata.
Además, muchos tienen solicitudes de asilo o ajustes de estatus pendientes, las cuales podrían verse afectadas por esta decisión.
La incertidumbre también impacta a las familias y comunidades que han integrado a estos migrantes, generando preocupaciones sobre separación familiar y pérdida de ingresos.
Opciones legales

A pesar del fallo, los migrantes afectados aún pueden explorar las siguientes opciones:
Asilo: Si enfrentan persecución en sus países de origen, pueden solicitar asilo en EE.UU.
Ajuste de estatus: Aquellos con familiares ciudadanos o residentes permanentes pueden ser elegibles para ajustar su estatus migratorio.
Asistencia legal: Es fundamental consultar con abogados de inmigración o organizaciones comunitarias para recibir orientación personalizada.
Organizaciones como el Justice Action Center y Haitian Bridge Alliance ofrecen apoyo y recursos legales para los afectados.
La decisión de la Corte Suprema representa un cambio significativo en la política migratoria de EE.UU., con consecuencias directas para más de medio millón de personas.
Es crucial que los migrantes hispanos en EE.UU. se informen sobre sus derechos y busquen asesoría legal para navegar esta compleja situación.
Para más información, visita QuéOnnda.com