La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, lanzó una fuerte advertencia este miércoles respecto al incremento de arrestos en California, en el contexto de las crecientes protestas por las redadas migratorias que han provocado indignación en comunidades latinas a lo largo del estado.
Durante una entrevista transmitida por el programa Fox & Friends, Pam Bondi respaldó la política del presidente Donald Trump de intensificar las acciones migratorias en todo el país y criticó directamente al gobernador de California, Gavin Newsom, por su manejo de la situación. “El presidente Trump va a hacer que Estados Unidos vuelva a ser seguro. Vamos a proteger a los estadounidenses, y eso incluye a los californianos. Si Gavin Newsom no los va a proteger, nosotros sí”, declaró Bondi a Lawrence Jones III en Fox And Friends el miércoles.
Amenaza de cargos federales por saqueos
Pam Bondi advirtió que a toda persona que cometa saqueos en medio de las protestas se le procesará bajo la Ley Hobbs.
Es una legislación federal de 1946 que castiga con severidad los robos que afecten el comercio interestatal.
“Si usted saquea un negocio en California durante estas protestas, será acusado de robo bajo la Ley Hobbs”, afirmó Pam Bondi.
“Ya no se tolerará la impunidad. Robar es un delito grave, y las imágenes de tiendas siendo saqueadas y vandalizadas no quedarán sin consecuencias”.
La aplicación de esta ley representa un cambio significativo en la respuesta del gobierno federal a las manifestaciones.
Permitiendo a los fiscales federales actuar directamente sobre casos que anteriormente los manejaban las autoridades estatales.
Violencia contra agentes de seguridad
Pam Bondi también denunció lo que describió como una “ola de violencia” contra agentes del orden, tanto locales como federales, que intentan mantener la seguridad durante las manifestaciones.
“Hemos visto a oficiales de policía siendo golpeados, insultados y agredidos mientras tratan de proteger a la comunidad”, indicó.
“Ya hemos realizado más de 190 arrestos en conjunto con agencias locales y estatales, y se esperan más”.
Si usted golpea a un oficial, vamos tras usted
Las protestas en California comenzaron tras las recientes redadas migratorias realizadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en zonas como Los Ángeles y el Valle Central.
Las manifestaciones fueron particularmente intensas en barrios con alta población inmigrante.
Se han denunciado tácticas agresivas, el uso de gas lacrimógeno y detenciones indiscriminadas.
Resistencia desde California
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El gobernador Gavin Newsom ha condenado la intervención federal, calificándola de innecesaria y provocadora.
“La presencia militar y las amenazas de arrestos masivos solo alimentan el conflicto”, expresó en una conferencia reciente.
Mientras tanto, líderes comunitarios y defensores de derechos humanos han llamado a la calma.
También han exigido transparencia y límites al uso de la fuerza por parte de las autoridades federales.
Este episodio marca una nueva escalada en el conflicto entre el gobierno federal y California, estado que ha sido un baluarte en la defensa de los derechos de los inmigrantes en EE.UU.
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