La Leagues Cup 2025 dejó mucho más que un título histórico para Seattle Sounders. Durante la final en el Lumen Field, los reflectores no solo se posaron en la goleada 3-0 sobre Inter Miami, sino también en una curiosa y simbólica acción de los aficionados: el intercambio de camisetas de Lionel Messi por las de Paul Rothrock, uno de los héroes locales.
El gesto, que rápidamente se volvió viral en redes sociales, reflejó cómo el entusiasmo por apoyar a una figura de casa pudo incluso opacar, por momentos, al astro argentino.
La promoción que sorprendió a todos

Lo que parecía una protesta espontánea en realidad fue parte de una campaña organizada por Seattle Sounders.
Antes del silbatazo inicial de la final de la Leagues Cup, el club anunció que los aficionados podrían entregar cualquier camiseta de Messi de Inter Miami y recibir, sin costo, una camiseta de Rothrock, con la condición de que la promoción aplicaría hasta agotar existencias.
La idea buscaba reforzar la identidad local y elevar el orgullo de la afición en un escenario internacional.
La respuesta fue inmediata: decenas de fanáticos participaron en el intercambio, y las imágenes recorrieron el mundo en cuestión de horas.
Rothrock responde dentro del campo

La idea buscaba reforzar la identidad local
QuéOnnda.com
La apuesta de Seattle no pudo haber tenido un mejor desenlace.
Paul Rothrock selló la goleada con el tercer tanto de la noche, confirmando que su figura va en ascenso.
El delantero fue ovacionado por un estadio repleto, y muchos de los que se vistieron con su camiseta vivieron el triunfo con un sentimiento de orgullo doble.
Para los seguidores hispanos en EE.UU., esta escena refleja la importancia de valorar al talento local y cómo, en un deporte globalizado, los gestos de comunidad todavía tienen gran peso.
Seattle hace historia en la MLS

Con este resultado en la Leagues Cup, los Sounders se convierten en el primer club estadounidense en conquistar todos los títulos disponibles para un equipo de la MLS:
La Copa de la Liga, la MLS Cup, el Supporters’ Shield, la US Open Cup y la Liga de Campeones de la Concacaf.
Este logro consolida a Seattle como una de las instituciones más exitosas y consistentes del fútbol norteamericano.
Para Inter Miami, en cambio, la derrota significó un golpe anímico y deportivo.
Aunque Messi sigue siendo la gran atracción, lo ocurrido en Seattle es una señal de que los rivales no solo buscan vencerlos en la cancha.
Sino también contrarrestar su influencia fuera de ella.
Para más información, visita QuéOnnda.com