Lo que debía ser una tarde común y tranquila terminó en tragedia para una familia hispana en el sur de California.
Rodrigo, un niño de tan solo 12 años, perdió la vida tras ser alcanzado por una bala perdida mientras se encontraba jugando en un parque de la ciudad de Compton.
¿Qué pasó?
De acuerdo con el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles, el tiroteo ocurrió alrededor de las 3:55 p.m. del viernes 9 de mayo, en la intersección de Oris Street y South Aranabe Avenue, dentro de un parque local.
Los agentes de la estación del Sheriff de Compton fueron alertados sobre una agresión con arma de fuego y encontraron al menor gravemente herido.
En la escena, los oficiales comenzaron maniobras de primeros auxilios mientras llegaban los paramédicos del Departamento de Bomberos de Compton.
Rodrigo fue trasladado con vida al hospital más cercano, pero fue declarado muerto poco tiempo después debido a la gravedad de sus heridas.
¿Quién era Rodrigo?
Rodrigo —o “Rodri”, como le decían de cariño— era un niño alegre, lleno de sueños y con una pasión especial por el deporte.
Según su familia en una página de GoFundMe, amaba jugar fútbol, era un ferviente seguidor de los Boston Celtics, y también disfrutaba mucho del fútbol americano.
El deporte era su vida después de su familia. Era un niño con muchos sueños. Le encantaba correr, reír, jugar. Soñaba con ser futbolista profesional algún día. Su partida nos ha dejado destrozados
GoFundMe
Buscan al responsable
Testigos del tiroteo describieron al presunto tirador como un hombre vestido completamente de negro, que llevaba un pasamontañas negro y fue visto corriendo hacia el norte por la avenida Oleander antes de desaparecer.
Las autoridades aún no han determinado el motivo del ataque, y hasta el momento no hay arrestos relacionados con el caso.
El Departamento de Homicidios del Sheriff está a cargo de la investigación.
Cualquier persona que tenga información relevante puede comunicarse al 323-890-5500.
Quienes deseen brindar datos de forma anónima pueden hacerlo llamando a Crime Stoppers al 800-222-8477, o visitando lacrimestoppers.org.
Campaña de ayuda
Ante la inesperada tragedia, los padres de Rodrigo, Betty y Arturo, han abierto una cuenta en GoFundMe para solicitar ayuda a la comunidad.
Los fondos recaudados serán destinados a cubrir los gastos funerarios y brindar apoyo emocional y logístico a la familia en este momento tan doloroso.
“Cualquier donación que puedan y quieran dar será inmensamente agradecida. Hoy nos toca a nosotros vivir esta pesadilla, pero mañana podría ser cualquiera. Gracias por su solidaridad”, escribieron.
Un llamado a la comunidad
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La muerte de Rodrigo ha estremecido a toda la comunidad de Compton y reabre el debate sobre la violencia armada que afecta especialmente a barrios latinos y afroamericanos.
Activistas y vecinos exigen mayor presencia policial, programas preventivos y espacios seguros para que los niños puedan jugar sin temor.
Rodrigo deja un enorme vacío, no solo en su familia, sino también en su escuela, su equipo de fútbol y entre quienes tuvieron la fortuna de conocerlo.
Su historia no debe olvidarse: es un llamado urgente a proteger la infancia y a exigir justicia.
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