Un nuevo foco de controversia rodea al cantante mexicano Christian Nodal, quien está programado para ofrecer un concierto gratuito el 15 de septiembre en el Centro Histórico de Morelia, como parte de las festividades del Grito de Independencia.
Colectivos feministas, agrupados bajo la Red de Colectivas Feministas Michoacán (RedCoFem), lanzaron una petición en Change.org para exigir la cancelación del show, argumentando que su contratación conlleva el uso de recursos públicos para celebrar a alguien vinculado a presuntas conductas de violencia vicaria y económica.
La iniciativa reunió cerca de 2,000 firmas en sus primeros días.
En su pronunciamiento, las activistas sostienen que es inaceptable que un personaje señalado por conductas de control hacia su expareja, como lo denunciaron públicamente en marzo la cantante Cazzu y otros medios, sea la figura central de una celebración que simboliza justicia, libertad y unidad nacional.
Señalan que permitir su participación “manda un mensaje erróneo y nocivo a nuestras futuras generaciones”, especialmente en un estado con elevados índices de violencia contra las mujeres.
Además, cuestionan la transparencia de la contratación con recursos estatales: “Es indignante que el Gobierno de Michoacán decida utilizar recursos públicos en la contratación de Christian Nodal…”, expresan en la petición, y exigen claridad en el proceso de selección de artistas para eventos oficiales.
¿Autoridades cancelarán show de los Aguilar y Christian Nodal?
A pesar de la campaña y las firmas recolectadas, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla confirmó que el concierto seguirá en pie y respaldó la decisión gubernamental. Reconoció la libertad de expresión de las ciudadanas y ciudadanos, pero insistió que la celebración debe continuar con su programación.
Simultáneamente, una petición similar surgió en Guadalajara contra el concierto del Pepe Aguilar y sus hijos, Leonardo y Ángela, también como parte de los eventos patrios.
La iniciativa señala comentarios percibidos como ofensivos hacia migrantes y acusa a la familia Aguilar de promover narrativas exclusivas que no representan los valores de inclusión y dignidad esperados en actos públicos financiados por el erario.
La controversia en torno a Christian Nodal revela un choque entre la tradición cultural y la conciencia social.
Los colectivos implicados exigen que los símbolos de las fiestas patrias reflejen integridad, equidad y respeto; consideran que permitir la participación de figuras públicas envueltas en cuestionamientos sobre violencia familiar daña el mensaje institucional.
A pesar de la presión, el gobierno estatal mantiene al cantante en el programa, lo que sugiere una tensión latente entre ciudadanía crítica y poder político.
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