La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha sido escenario de tensiones entre Estados Unidos y otros países desde su creación. Pero durante la pasada administración de Donald Trump y ahora con su regreso a la Casa Blanca, estas tensiones han alcanzado un nivel sin precedentes.
El estilo directo y las demandas de Trump plantearon una pregunta clave: ¿Tiene Estados Unidos demasiada influencia sobre la ONU?
El peso de EEUU en la ONU

Estados Unidos es el mayor contribuyente financiero de la ONU, proporcionando aproximadamente el 22% de su presupuesto regular, según cifras oficiales.
Este apoyo económico ha llevado a muchos a preguntarse si la ONU se ve obligada a cumplir con las demandas estadounidenses para garantizar su financiamiento.
Por ejemplo, durante su mandato, Trump amenazó con recortar fondos a países que no apoyaran las resoluciones respaldadas por Washington.
En 2018, dejó claro que “Estados Unidos no es el único país con intereses en la ONU, pero sí el que más contribuye”.
Este tipo de declaraciones han generado críticas de que la administración utilizó su poder económico como una herramienta de presión política.
Las “demandas” de Trump

Jerusalén como capital de Israel
Uno de los momentos más controvertidos fue cuando Estados Unidos reconoció a Jerusalén como la capital de Israel en 2017.
A pesar de la oposición internacional, Trump amenazó con recortar ayuda a los países que votaran en contra de esta decisión en la Asamblea General.
Esta medida generó un debate sobre la independencia de la ONU frente a las presiones estadounidenses.
Cambio climático y el Acuerdo de París
En 2017, Trump también retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París, argumentando que era injusto para la economía estadounidense.
Esta decisión debilitó los esfuerzos globales para combatir el cambio climático
QuéOnnda
¿Obedece la ONU a EEUU?

Si bien Estados Unidos tiene una gran influencia en la ONU, también enfrenta resistencia de otros países miembros.
Por ejemplo, en 2018, la Asamblea General rechazó una resolución respaldada por Washington sobre la situación en Gaza.
Este tipo de episodios demuestran que, aunque el peso económico de EE.UU. es significativo, no siempre puede imponer su voluntad.
La influencia de Estados Unidos en la ONU es un tema complejo que trasciende administraciones.
Sin embargo, las políticas de Trump dejaron en claro que el financiamiento no garantiza el control absoluto.
Para la comunidad hispana, seguir de cerca estas relaciones internacionales es crucial, ya que muchas decisiones globales tienen un impacto directo en sus vidas.