Una nueva ola de redadas migratorias ha encendido las alarmas en comunidades hispanas de California. En Los Ángeles, múltiples ciudadanos estadounidenses de origen latino han sido detenidos durante operativos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), lo que ha generado fuertes denuncias de perfil racial y uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes.
Las operaciones, que comenzaron a principios de junio y podrían extenderse por al menos 60 días, ya han resultado en cientos de detenciones, incluidas personas con ciudadanía estadounidense. Activistas denuncian que a muchos los interceptan únicamente por su apariencia o por hablar español, sin que exista causa legal que lo justifique. Uno de los casos más impactantes es el de Cary López Alvarado, una mujer embarazada de 23 años a la que arrestaron junto a su pareja y su primo. A pesar de declarar que era ciudadana y mostrar pruebas, la encadenaron de pies y manos y la trasladaron a un centro de procesamiento. Posteriormente fue liberada con dolores y tuvo que ser hospitalizada; cuatro días después dio a luz. Su pareja, proveedor principal del hogar, fue deportado a Texas, lo que ha dejado a la familia en una situación de incertidumbre económica y legal.
Más casos, más indignación
La comunidad también reaccionó con indignación ante la detención de Adrián Andrew Martínez, joven trabajador de Walmart, a quien arrestaron violentamente por agentes mientras defendía a un compañero.
Pese a que testigos afirmaban que Martínez era ciudadano estadounidense, se le sujetó por el cuello y se le lanzó al suelo en medio de una tienda repleta de clientes.
Una nueva ola de redadas migratorias ha encendido las alarmas
Otro caso viral de perfil racial fue el de Javier Ramírez, detenido frente a su negocio en Montebello mientras gritaba “¡Tengo mi pasaporte, soy ciudadano!”.
Su arresto provocó una ola de protestas en redes sociales y movilizaciones en su ciudad.
En todos los casos, ICE alega que las detenciones se dieron por “obstrucción”, aunque los videos y testimonios apuntan a una actitud agresiva y discriminatoria.
Defensa legal y organización comunitaria
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Abogados y organizaciones defensoras de los derechos civiles han comenzado a ofrecer asistencia legal gratuita a las víctimas de estas redadas de perfil racial.
Se insta a las personas a no firmar ningún documento sin presencia legal y a guardar evidencia en video si se sienten amenazadas.
Las comunidades latinas también se han organizado en centros comunitarios, iglesias y escuelas para difundir información sobre los derechos durante un operativo migratorio.
Saber que toda persona en EE.UU., sin importar su estatus migratorio, tiene derecho a guardar silencio y a no ser detenido sin causa, es clave para evitar abusos.
¿Por qué esto debe importarte?
Si eres ciudadano, residente o estás en proceso migratorio, es fundamental que conozcas tus derechos.
El perfil racial no solo es ilegal, sino que también erosiona la confianza entre la comunidad latina y las autoridades.
Estas redadas están dejando a familias separadas, negocios cerrados y personas traumatizadas.
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