El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) informó oficialmente que ha logrado recapturar a dos de los cuatro inmigrantes en situación irregular con historial criminal que escaparon del Centro de Detención Delaney Hall, ubicado en Newark, Nueva Jersey, el pasado 12 de junio de 2025.
Los individuos involucrados han sido calificados como “peligrosos” debido a la gravedad de los delitos por los que fueron detenidos originalmente. Dos de ellos permanecen prófugos, lo que ha activado una intensa búsqueda por parte de agencias federales y locales.
Desmintiendo rumores: sin disturbios dentro de Delaney Hall
Ante las versiones en algunos medios sobre posibles disturbios o motines internos, el DHS aclaró que no se han registrado altercados generalizados dentro del centro Delaney Hall tras la fuga.
Esta instalación, administrada por una entidad privada bajo contrato federal, mantiene, según las autoridades, un compromiso con la prestación de servicios adecuados a los detenidos.
Esto incluye atención médica 24/7, visitas familiares y legales tanto presenciales como virtuales, acceso a bibliotecas, servicios religiosos, comidas especiales por motivos de salud o creencias, actividades recreativas y traducción de idiomas.
Captura de dos de los evadidos
El 13 de junio, Joel Enrique Sandoval-López, de nacionalidad hondureña, fue localizado y arrestado en Passaic, Nueva Jersey, por agentes de ICE, el FBI y la policía local.
Según el informe oficial, durante el operativo Sandoval-López opuso resistencia física violenta, incluyendo patadas y amenazas de muerte contra los oficiales.
Su historial criminal incluye cargos por posesión ilegal de arma de fuego y agresión agravada.
Ese mismo día, Joan Sebastian Castañeda-Lozada, originario de Colombia, intentó entregarse voluntariamente en la estación de la Policía Estatal de Nueva Jersey en Bridgeton.
No obstante, debido a las políticas de “ciudad santuario” que limitan la cooperación de las autoridades locales con ICE, su entrega fue rechazada.
Finalmente, el 15 de junio se entregó de manera directa a agentes federales en Milleville, Nueva Jersey.
Llamado a la colaboración ciudadana y recompensa
En conferencia de prensa, un alto funcionario del DHS expresó preocupación por el rechazo a la cooperación en el caso de Castañeda-Lozada y reafirmó el compromiso de la agencia con la seguridad pública:
“Afortunadamente, este inmigrante ilegal ya fue detenido y ya no representa una amenaza para los estadounidenses”, afirmó.
La dependencia federal reiteró su llamado a la ciudadanía para colaborar en la búsqueda de los dos sujetos restantes y recordó que sigue vigente una recompensa de $10,000 para quien proporcione información que permita dar con su paradero. Las pistas pueden reportarse al 911 o a la línea de ICE (866-DHS-2-ICE).
La fuga en Delaney Hall ha encendido las alarmas en los sistemas de detención migratoria en EEUU
¿Quiénes son los dos fugitivos restantes?
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Franklin Norberto Bautista-Reyes: ciudadano hondureño que ingresó ilegalmente a Estados Unidos en 2021. El 3 de mayo de 2025 fue detenido en Wayne Township, Nueva Jersey, por asalto agravado, intento de causar lesiones corporales, amenazas de tipo terrorista y posesión de arma con fines ilícitos.
Andrés Pineda-Mogollón: originario de Colombia, ingresó con visa de turista en 2023 pero no salió al vencer su periodo autorizado. El 25 de abril de 2025 fue arrestado en Nueva York por hurto menor, y posteriormente, el 21 de mayo, la policía de Union, Nueva Jersey, lo detuvo por robo residencial, conspiración para robo y posesión de herramientas para robo.
Aunque dos de los cuatro prófugos ya han sido recapturados, el paradero de los otros dos sigue siendo incierto. El DHS y el FBI continúan movilizando recursos y haciendo un llamado activo a la ciudadanía para garantizar la pronta localización y detención de estos individuos considerados una amenaza directa a la seguridad pública.
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