A solo unos días de haber acaparado titulares por abandonar en vivo una entrevista y salir de las instalaciones de Telemundo, Fátima Bosch, Miss Universo 2025, volvió a México de forma sorpresiva. Su llegada ocurrió en medio de un ambiente de curiosidad mediática, ya que su nombre sigue en el centro de la conversación pública por las controversias que rodean su coronación y su reciente desencuentro con la televisora hispana.
Las cámaras del programa Ventaneando documentaron el momento exacto en que la tabasqueña apareció en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Lejos de los looks glamorosos con los que suele ser vista en eventos oficiales, esta vez optó por un estilo discreto: sudadera amplia, gorra y lentes oscuros, en un evidente intento por pasar inadvertida entre los pasajeros.
Aunque su intención era llegar “de incógnito”, el anonimato duró muy poco. Reporteros y camarógrafos presentes en la terminal reconocieron rápidamente a la reina de belleza y se acercaron para obtener sus primeras declaraciones tras la ola de críticas generada por su salida del programa de Telemundo.
En un inicio, Fátima intentó mantener la reserva y avanzar sin responder preguntas, limitándose a sonreír y seguir su camino. Sin embargo, ante la insistencia de los medios, decidió detenerse por unos instantes y aclarar el motivo de su presencia en el país.
En una breve pero significativa declaración, explicó: “No es mi bienvenida, es que justo tenemos un evento y se supone que veníamos de incógnita, pero qué gusto verlos”.
Con esta frase, dejó claro que su regreso no respondía a una mudanza ni a un tema personal, sino a compromisos laborales ligados a sus funciones como Miss Universo.
Fátima Bosch: Orgullo por la cuarta corona para México
Al ser cuestionada sobre cómo vive el triunfo obtenido en la 74ª edición de Miss Universo, celebrada el pasado 21 de noviembre en Tailandia, Bosch respondió con un tono más relajado. La modelo reiteró el orgullo que siente por haber conseguido la cuarta corona de Miss Universo para México, sumándose a la lista de representantes mexicanas que han logrado el máximo título de la belleza internacional.
“Súper feliz, muy orgullosa y con mucha responsabilidad. Ya trabajando, contenta”, expresó, subrayando que su agenda como reina ya está en marcha y que asume su papel con seriedad.
Sus palabras reforzaron la idea de que, pese a la controversia, está enfocada en cumplir con los compromisos que conlleva el título.
El ambiente cambió cuando algunos reporteros retomaron uno de los temas más sensibles para ella: los rumores sobre una supuesta renuncia a la corona, versiones que circulan en redes y de las que Fátima ha manifestado molestia en otras ocasiones.
Lejos de entrar en polémica o extender explicaciones, la joven de 25 años optó por una respuesta corta, clara y diplomática, marcando un límite ante ese tipo de preguntas: “No tengo nada que decir del tema, que tengas un bonito día”.
Con esa frase, Bosch dejó sin alimentar las especulaciones y puso fin al intercambio. Después, continuó su camino entre el tumulto de cámaras y micrófonos, manteniendo la postura de seguir adelante con su trabajo y evitar confrontaciones directas con la prensa sobre asuntos que considera cerrados o malintencionados.
Aquí el video de la llegada de Fátima Bosch, Miss Universo.
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