En Los Ángeles, el aumento de redadas migratorias encabezadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) durante el verano de 2025 ha generado un impacto inesperado: la caída dramática de las llamadas al Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD).
Datos obtenidos por The Los Angeles Times muestran que, tras el inicio de los operativos federales en junio, las solicitudes de ayuda a la policía local se desplomaron un 28% en apenas dos semanas, lo que equivale a unas 1,200 llamadas menos por día en comparación con el mismo período de 2024. Esta tendencia, aunque se recuperó parcialmente en julio, sigue mostrando una caída del 5% respecto al año pasado.
El miedo a denunciar delitos

Las solicitudes de ayuda a la policía local se desplomaron
QuéOnnda.com
El fenómeno preocupa especialmente a defensores de derechos humanos.
Ya que los delitos más afectados por la falta de reportes son la violencia doméstica y las disputas familiares, que cayeron un 7% y 16% respectivamente en las zonas más impactadas por las redadas.
El temor de las víctimas a llamar a la policía por miedo a la deportación está dejando situaciones de abuso en la sombra.
Incluso en distritos de mayoría latina, donde la policía se ha declarado “santuario”, persiste la desconfianza.
“Veremos un miedo a las fuerzas del orden que perdurará por generaciones”, explicó Vida Johnson, profesora de Derecho en Georgetown.
Una crisis de confianza pública

El LAPD insiste en que no aplica leyes civiles de inmigración, pero la presencia de oficiales locales acompañando a federales en operativos ha profundizado la percepción de complicidad.
Organizaciones como la Centro Community Service Organization advierten que muchos residentes ya no ven a la policía como un aliado.
Los líderes policiales han lanzado programas de acercamiento comunitario, como academias ciudadanas en español y reuniones con líderes religiosos, pero el efecto es limitado.
Para muchos inmigrantes, la imagen de agentes federales y locales trabajando juntos en las calles es suficiente para sembrar dudas sobre su seguridad.
Para más información, visita QuéOnnda.com


