La Navidad suele asociarse con reuniones familiares, celebraciones y regalos, pero en algunos espacios laborales también se convierte en un momento para reconocer el trabajo en equipo. Ese es el caso de Lili Estefan y Raúl de Molina, conductores del programa El Gordo y la Flaca, quienes cada año tienen un detalle navideño con todas las personas que forman parte del show de Univision.
Durante una reciente emisión del programa, Raúl de Molina explicó que este gesto no es algo aislado ni improvisado, sino una tradición que han mantenido con el paso de los años.
Los regalos de Lili y Raúl en El Gordo y la Flaca
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“No hay muchos talentos que hacen eso aquí en Univision, pero nosotros le compramos regalos a cada una de las personas que trabajan con nosotros porque se merecen eso y más”, comentó el presentador de origen cubano en vivo, destacando la importancia del equipo que hace posible el programa diariamente.
El Gordo y la Flaca, que se transmite de lunes a viernes a las 4:00 p. m. (hora del Este), no solo depende de sus conductores frente a cámara, sino de camarógrafos, productores, técnicos, asistentes y personal administrativo.
Para Lili y Raúl, reconocer ese esfuerzo es parte fundamental de la dinámica laboral que han construido a lo largo de los años.
Un regalo clásico y bien recibido
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En esta ocasión, los presentadores optaron por un regalo práctico y tradicional: una botella de whisky de una marca reconocida, pensada como un obsequio navideño para cada integrante del equipo.
Lili Estefan explicó cómo se organizó la entrega, compartiendo que hizo el pedido a una licorería de confianza para que las botellas fueran enviadas directamente a las oficinas del programa.
“Llamé a mi amigo de Sunset Liquor, el dueño nos mandó el delivery hasta acá, llegaron todas las botellas de whisky para el equipo a la oficina de Raúl”, relató la conductora.
Minutos después, confirmó que todos los regalos ya habían sido entregados.
La reacción del equipo no pasó desapercibida.
Durante la transmisión, se escucharon aplausos y expresiones de agradecimiento por parte de camarógrafos y personal técnico, evidenciando que el gesto fue bien recibido y valorado.
Más allá del regalo material
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Este no es el único detalle que Lili Estefan y Raúl de Molina tienen con su equipo durante la temporada navideña.
El presentador también recordó que, en otras ocasiones, han organizado convivencias o comidas navideñas, reforzando el sentido de comunidad dentro del programa.
“De vez en cuando los invitamos a una fiesta navideña a comer también”, señaló Raúl, subrayando que para ellos es importante compartir más allá del ámbito estrictamente profesional.
Para muchos trabajadores de la industria televisiva, este tipo de gestos representan algo más que un regalo: son una forma de reconocimiento y respeto.
En un medio tan competitivo como la televisión en Estados Unidos, donde los ritmos de trabajo suelen ser intensos, acciones como estas ayudan a fortalecer el ambiente laboral.
Sin duda, este gesto navideño reafirma por qué ambos conductores siguen siendo figuras queridas dentro y fuera de la pantalla.
Archivado como: Regalos de Lili Estefan y Raúl de Molina
