Ana Cecilia “CeCí” Escobar-Arevalo, madre de dos hijos y residente del noreste de Washington D.C., lleva desaparecida desde la mañana del viernes 30 de mayo de 2025.
Según su familia, ese día salió de su vivienda en la cuadra 5800 de la 8th Street NE alrededor de las 7:20 a.m. para dirigirse a su empleo, pero nunca llegó y no se ha sabido nada de ella desde entonces.
Descripción y acciones de búsqueda

La última ubicación conocida de su teléfono celular fue registrada cerca de Newburg, Maryland, una zona ubicada a unos 80 kilómetros al sureste de la capital.
Su vehículo, un Honda CR-V azul modelo 2008 con placas de DC (EB2261), tampoco ha sido localizado hasta la fecha.
Escobar-Arevalo fue vista por última vez vestida completamente de negro: con pantalones, suéter y zapatos de ese color.
La policía la describe como una mujer de 1.65 metros de estatura (5’5″), 64 kg (142 libras), con cabello largo color castaño y ojos marrones.
Desde su desaparición, la familia, amigos, voluntarios y miembros de la comunidad han distribuido volantes, realizado controles de bienestar en hospitales y han contado con la colaboración de detectives y medios locales.
Sin embargo, no ha surgido ninguna pista concreta sobre su paradero.
La familia de Ana Cecilia lanzó una campaña en GoFundMe que ha recaudado cientos de dólares para ayudarles a enfrentar los gastos diarios, brindar apoyo emocional y económico a sus hijos —Gaby (17 años) y Xavy (12)—, y contratar a un investigador privado que colabore en las labores de búsqueda.
“La desaparición de Ana ha destrozado nuestro mundo”, expresaron sus familiares en la página de la campaña. “Estamos buscándola sin descanso, con la esperanza y la oración constante de que regrese sana y salva”.
Una historia de esfuerzo y arraigo

Nacida en El Salvador y criada por su abuela, Ana Cecilia emigró legalmente a Estados Unidos a los 17 años, donde comenzó trabajando como asistente de mesera.
Con mucho esfuerzo, llegó a convertirse en jefa de barra en el National Democratic Club, un exclusivo establecimiento en D.C. donde es muy respetada por sus colegas y clientes.
Su familia la describe como una mujer trabajadora, solidaria, alegre y de profunda fe.
Es miembro activa de la iglesia católica Shrine of the Sacred Heart (Sagrado Corazón) y es conocida por su generosidad y devoción a su familia.
“CeCí es una mujer confiable y llena de vida”, expresó su entorno. “Le encanta estar en casa, bailar cumbia, comer pupusas y pasar tiempo con sus hijos y su esposo, Hugo Pérez”.
Un llamado urgente a la comunidad

La familia de Ana Cecilia está haciendo un llamado desesperado a la comunidad para difundir su historia y colaborar con cualquier información que pueda ayudar a encontrarla.
“Salió a trabajar, como cualquier otro día”, escribió su esposo. “Pero ese día, no volvió. Por favor, ayúdennos a traerla de regreso a casa”, precisó.
Estamos haciendo todo lo posible por mantener su nombre y rostro visibles, pero esta búsqueda requiere recursos y experiencia que simplemente no tenemos por nuestra cuenta
Cómo puedes ayudar a Ana Cecilia Escobar Arevalo
Si tienes información sobre el paradero de Ana Cecilia, puedes contactar al Departamento de Policía Metropolitana de D.C. o contribuir económicamente en la campaña de GoFundMe organizada por su familia.
Compartir su historia también puede marcar la diferencia.
Esta situación recuerda a muchos miembros de la comunidad hispana en Estados Unidos la importancia de la solidaridad, la fe y el poder de la acción colectiva cuando uno de los nuestros necesita ser encontrado.
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