El excongresista republicano George Santos, de Nueva York, fue condenado a siete años de prisión tras declararse culpable de fraude electrónico y robo de identidad agravado. La sentencia, dictada este viernes 25 de abril de 2025 en una corte federal del Distrito Este de Nueva York, marca el desenlace de uno de los escándalos políticos más sonados de los últimos años en Estados Unidos.
Además de la pena de cárcel, George Santos deberá reembolsar 373,749.97 dólares a las víctimas afectadas por sus acciones, según lo establecido en su acuerdo de culpabilidad alcanzado con la Fiscalía en agosto de 2024. George Santos, de 35 años, estuvo menos de un año en el Congreso antes de que lo expulsaran en diciembre pasado, tras una votación bipartidista impulsada por múltiples denuncias sobre su conducta ilegal y engañosa.
Red de mentiras y fraudes
El exlegislador, de origen brasileño, construyó una carrera política basada en afirmaciones falsas.
Se descubrió que George Santos había inventado antecedentes laborales en grandes firmas como Citi Group y Goldman Sachs.
Así como una supuesta ascendencia judía sobreviviente del Holocausto, entre otros engaños.
Santos estuvo menos de un año en el Congreso
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Según el Departamento de Justicia, George Santos robó la identidad de varios seguidores, incluidos familiares, para financiar su campaña electoral.
También utilizó fondos de campaña para gastos personales como tratamientos estéticos y ropa de diseñador.
Así como cosméticos y servicios en plataformas como OnlyFans, según reveló una investigación de ética del Congreso.
Asimismo, investigaciones periodísticas revelaron que no existía evidencia de que George Santos hubiese estudiado en universidades como afirmaba.
Ni que hubiese fundado una ONG de rescate animal.
Caída documentada
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Después de ser expulsado del Congreso, George Santos recurrió a nuevas formas de ingresos.
Como mensajes personalizados en la plataforma Cameo y el lanzamiento de un podcast titulado “Pants on Fire”, en referencia a su historial de mentiras.
En una reciente entrevista con el New York Times, George Santos aseguró estar resignado a cumplir los 87 meses de cárcel solicitados por el Departamento de Justicia.
Agradeció en redes sociales a quienes aún lo apoyan.
Este caso resalta la importancia del escrutinio público sobre las figuras políticas.
Así como el impacto de la verificación de información en una era dominada por las redes sociales.
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